Por lo general, una cuenta bancaria conjunta funciona como cualquier otra cuenta de cheques o de ahorros. La diferencia es que dos personas, ya sea una pareja casada o no, un padre y su hijo, una persona mayor y su cuidador, son titulares de la cuenta y los dos tienen control total de la misma. Esto significa que cada titular de la cuenta puede obtener una tarjeta de débito, realizar compras, emitir cheques y hacer depósitos y retiros, todo con o sin el consentimiento de la otra persona.

El beneficio principal de una cuenta bancaria conjunta es que simplifica su vida financiera. Puede reducir el tiempo, el costo y el inconveniente de pagar facturas, al compartir los gastos del hogar como hipotecas, pagos de auto, servicios públicos y compras del supermercado. También pueden ahorrar para sus metas en común, como para una nueva casa o unas vacaciones.

Retirar dinero o realizar pagos en línea desde una cuenta también les permite hacer juntos un presupuesto de su dinero. Ya que ambos pueden ver la actividad de su cuenta, se podrían sentir menos tentados a derrocharlo o a hacer compras en secreto.

Hay personas que se sienten más cómodas con las cuentas individuales. Puede ser estresante para una relación si los titulares de una cuenta bancaria conjunta tienen diferentes circunstancias financieras o distintos hábitos para usar el dinero, por ejemplo, si uno de los titulares tiene mucha deuda o si ha manejado mal su dinero en el pasado. En estos casos, puede ser mejor tener cuentas separadas, por lo menos hasta que se encuentre en una situación financiera más estable.

Además, algunos terceros, como el Servicio de Impuestos Internos (Internal Revenue Service o IRS), pueden deducir fondos de una cuenta conjunta para cubrir la deuda de una de las personas. También hay que recordar que los cotitulares de una cuenta bancaria conjunta pueden tener acceso a los fondos, hacer retiros y hablar sobre la cuenta con representantes del banco, sin la autorización del otro.

Las cuentas se pueden abrir en persona en una sucursal o en línea, dependiendo del banco que elija. Si planean hacerlo en persona, ambos titulares de la cuenta deben estar presentes.

Independientemente de dónde o cómo abran su cuenta, deberán mostrar información básica que los identifique: licencias de conducir, identificaciones del estado o pasaportes. También se les pedirá información personal, como las fechas de nacimiento, números de Seguro Social y dirección actual.

Al establecer su cuenta, pueden decidir cómo administrarla y monitorearla, lo que incluye inscribirse en la banca en línea y recibir alertas de la cuenta (para uno de ustedes o ambos). También pueden decidir si establecen perfiles de la banca en línea compartidos o de forma individual.

Existen varias razones por las cuales podría no querer mantener abierta su cuenta conjunta: el rompimiento de una relación, divorcio, un fallecimiento en la familia, o una decisión mutua de cambiar de banco. Por lo general, un titular de la cuenta puede tomar esa decisión, aunque algunos bancos requieren el consentimiento de ambas partes. Revise el acuerdo de su cuenta para más detalles.

Tendrá que retirar o transferir todo el dinero de la cuenta antes de cerrarla. También es recomendable abrir otra cuenta bancaria o tener ya una abierta, para así poder transferir los fondos fácilmente.

Si tiene la cuenta conjunta con un banco en línea, es posible que los titulares de la cuenta tengan que ingresar su información para entrar y aprobar el cierre de esta. Además, tal vez tenga que proporcionar una identificación como la licencia de conducir, identificación estatal o pasaporte.

Para algunas personas, las cuentas vinculadas ofrecen un punto medio entre las opciones de cuentas conjuntas e individuales. Este tipo de cuentas le permite realizar transferencias fácilmente entre las cuentas, por lo que puede coordinar las cuentas de ahorros con el pago de facturas sin tener que darle acceso total de sus cuentas individuales a la otra persona.

Muchas personas vinculan las cuentas de cheques y de ahorros en el mismo banco, pero usted puede hacerlo en diferentes instituciones financieras. Para esto, deberá proporcionar la siguiente información:

Una cuenta bancaria conjunta se basa en la confianza. Asegúrese de tener un diálogo honesto y continuo sobre las finanzas con la pareja, familiar o amigo con quien comparte la cuenta. Estas conversaciones pueden ayudar a que su cuenta conjunta se convierta en la base de una relación financiera exitosa y duradera.