Comience por crear un presupuesto familiar si aún no tiene uno, e incluya una partida para deportes para los hijos. Investigue un poco sobre cuánto costará un deporte antes de inscribir a su hijo. Entre más específico sea, mejor. De esa manera, los deportes serán parte de su plan de gastos y no tendrá que apresurarse a buscar fondos a última hora.
Considere establecer una cuenta de ahorros separada solo para deportes y realice contribuciones regulares, incluso fuera de temporada. Luego, haga seguimiento de sus gastos para asegurarse de que se ajusta al presupuesto. Involucre a su hijo. Ahorrar y gastar en sus deportes son excelentes oportunidades para enseñarle a su hijo sobre el dinero.
Algunos deportes, como el hockey y el golf, suelen necesitar más equipo deportivo o instalaciones especializadas, lo cual puede aumentar los gastos; mientras que otros como el fútbol, el básquetbol o el atletismo suelen tener gastos generales más bajos. Estas actividades pueden ser una excelente manera para desarrollar las habilidades atléticas básicas que pueden aplicarse a una gran variedad de deportes. Claro que, si a su hijo le apasiona un deporte en particular, también es importante apoyar su entusiasmo.
Las ligas recreativas locales pueden ofrecer una buena competencia a un costo significativamente menor que las ligas en las que se viaja. También toman menos tiempo, lo que hace que sea más fácil para los niños probar una serie de deportes diferentes. Los programas deportivos de primaria y de escuela media, si están disponibles, también son una opción económica. Algunas ligas recreativas y programas escolares eximirán cargos, proporcionarán asistencia financiera o le permitirán establecer un plan de pago.
La presión de grupo puede impulsar compras de equipo deportivo innecesarias. Recuerde que un equipo deportivo nuevo y de primera calidad no hará que su hijo sea un mejor atleta. Considere la posibilidad de comprarlo de segunda mano o usar el que le hayan pasado sus hermanos o amigos. Le sorprenderá cuánto equipo deportivo como nuevo está disponible. Además de que el equipo deportivo les queda pequeño después de un tiempo, los niños a menudo cambian de opinión sobre un deporte antes de darle mucho uso. Comience con piezas básicas y añada a medida que el compromiso y las habilidades de su hijo crezcan. También compruebe si su liga tiene convenios para descuentos con las tiendas de deportes locales.
Los equipos a menudo compensan gastos como los viajes a los torneos organizando lavados de automóviles, ventas de pasteles u otras actividades de recaudación de fondos. También puede pedir a las empresas locales o grupos comunitarios que patrocinen a su equipo y donen dinero en efectivo o equipo deportivo. Algunas corporaciones grandes y grupos sin fines de lucro ofrecen subsidios a familias individualmente para cubrir los cargos y el equipo deportivo. Consulte también con el gobierno local, estatal y federal para ver qué ayuda financiera pueden ofrecer.
Es posible que pueda ahorrar dinero compartiendo los viajes en automóvil, los alojamientos para estancias cortas o suites de hotel, intercambiando equipo deportivo y comprando refrigerios al por mayor. Contratar un autobús o alquilar una furgoneta para viajar a torneos distantes puede ser más económico que conducir en automóviles separados.
Las investigaciones muestran que los niños que realizan actividad física obtienen mejores resultados a lo largo de su vida.
Eso depende de la edad, las habilidades y el compromiso de su hijo. Lo importante cuando es pequeño es que se divierta, desarrolle habilidades y pruebe una variedad de deportes, lo cual puede hacer en ligas recreativas menos costosas. A medida que su hijo crece, pueden valer la pena el tiempo y los gastos adicionales de un equipo que viaja si quiere jugar en la secundaria y en la universidad. Use su entusiasmo, motivación y compromiso como guías.
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