En una auditoría energética de la vivienda, un profesional certificado lleva a cabo un recorrido habitación por habitación para evaluar el uso de energía en su hogar. Una vez terminada, recibirá un reporte en donde se identifica en dónde se está usando la energía de forma ineficiente y qué puede hacer para corregir esta debilidad.

Crédito fiscal: un crédito fiscal de la Ley de Reducción de la Inflación puede cubrir 30% del costo de la auditoría, hasta $150.

El Crédito por las mejoras de eficiencia energética de la vivienda ofrece un crédito fiscal de 30% de gastos que califiquen para una variedad de mejoras de calefacción y enfriamiento.

Crédito fiscal: hasta $600 por artículo. Los aires acondicionados centrales, calentadores de agua y bóileres nuevos necesitan cumplir con el nivel de eficiencia más alto del Consorcio para la Eficiencia Energética (Consortium for Energy Efficiency, o CEE) para calificar para un crédito. También califica cualquier componente eléctrico que se necesite como respaldo (como paneles nuevos). Estos inevitables costos de propiedad de energía y mejoras para un hogar de energía eficiente tienen un límite de un crédito total de $1,200 al año.

Las bombas de calor, estufas de biomasa y los bóileres con eficiencia térmica con clasificación de por lo menos 75% califican para un crédito de hasta $2,000 por año. Los costos pueden incluir la mano de obra por la instalación.

Con el uso de sistemas controlados a través de aplicaciones, puede ajustar las luces y termostatos de manera remota, para apagar lo que no esté usando más fácilmente.

Inversión: los kits básicos de luces inteligentes se venden por menos de $100 y los termostatos inteligentes pueden costar menos de $200.

Los sistemas de detección de fugas envían una señal si hay averías en la tubería, o en algunos casos, si se deja abierta alguna llave del agua. Una vez que se detecta cualquier irregularidad, el sistema cierra el agua para prevenir una posible inundación, lo que podría ahorrarle miles de dólares en reparaciones al hogar.

Inversión: el precio de los sistemas de detección de fugas varía y va de $200 a $2,000.

Las ventanas de baja emisividad capturan el calor del sol y emiten niveles bajos de energía térmica radiante que le ayudan a calentar su hogar y a reducir la pérdida de energía en un promedio de 33%, de acuerdo con el Departamento de Energía de los Estados Unidos.

El Crédito por las mejoras de eficiencia energética de la vivienda también cubre las mejoras a puertas exteriores, ventanas y tragaluces que cumplan con los requisitos de Energy Star, así como mejoras al aislamiento que cumplan con los estándares del Código Internacional de Conservación de Energía (International Energy Conservation Code, o IECC).

Inversión: el costo de sus ventanas con vidrio de baja emisividad podría ser aproximadamente de un 10 a un 15% más alto.

Crédito fiscal: $250 por puerta (total de $500), hasta un total de $600 por ventanas y tragaluces. Los costos por la instalación no califican para estos créditos.

Puede reducir sus facturas de electricidad al pasar de fuentes de energía tradicionales a fuentes como energía solar; los ahorros podrían ser de hasta un 50%, dependiendo de su ubicación y de las tarifas de electricidad. Instalar paneles solares puede ser costoso, aunque el precio ha disminuido en años recientes debido a los incentivos fiscales y avances tecnológicos.

Los calentadores de agua son de los principales consumidores de energía en el hogar. Instalar un calentador solar puede recortar el costo del agua caliente a la mitad, de acuerdo con el Departamento de Energía de los Estados Unidos. Existen otras tecnologías alternas que pueden calentar su agua más eficientemente. Los sistemas de recirculación, por ejemplo, llevan rápidamente el agua caliente a las llaves del agua. Ese es un beneficio importante, ya que una gran cantidad de agua que se usa para la regadera se desperdicia cuando esperamos a que esta se caliente.

Inversión: el precio de los paneles solares va de $3,000 a $30,000, dependiendo del tamaño de su casa y del tipo y modelo que elija. Con esa variedad de precios es razonable ver varias opciones para encontrar el mejor precio para sus necesidades. El costo de los calentadores de agua solares va de $1,000 a $5,000, dependiendo del tamaño y estilo. Puede comprar un sistema de recirculación por menos de $400.

Créditos fiscales: el Crédito por energía limpia residencial puede cubrir 30% del costo por mejoras con energía limpia nueva que califique, incluidos paneles de energía solar, calentadores de agua solares, turbinas de viento, bombas de calor geotérmicas, celdas de combustible y tecnología de almacenamiento de baterías que cumplan con ciertos estándares.

Dejar una computadora encendida 24 horas al día, 7 días a la semana, puede costarle cerca de $80 al año en costos de energía, mientras que dejar un televisor encendido la mitad del día puede costar incluso más. Los monitores de energía muestran en detalle cuánta energía utiliza y cuáles son los aparatos que consumen más electricidad.

Inversión: los sistemas varían en precio y sofisticación; la mayoría cuestan entre $150 y $400, aunque puede pagar más de $1,000 por un modelo de primera línea. Puede monitorear un electrodoméstico o instalar un sistema en el interruptor principal para supervisar toda la casa.

Los electrodomésticos inteligentes pueden ser verdaderamente eficientes. Por ejemplo, los refrigeradores inteligentes tienen una computadora integrada que monitorea lo que hay adentro, para ayudarle a evitar el desperdicio de alimentos y a hacer su compra del supermercado más eficiente en cuanto al costo. Un lavaplatos inteligente puede detectar qué tan sucios están los platos para una limpieza más eficiente; y ahorrarle agua y energía.

Inversión: podría pagar un poco más de $3,500 por un refrigerador inteligente y cerca de unos $1,000 por un lavaplatos inteligente.

Si está considerando un vehículo eléctrico, lo más probable es que haga la mayor parte de la carga en casa. Aunque puede usar un tomacorriente regular de casa, una estación de carga por lo general es más rápida y eficiente. Cuando carga un vehículo eléctrico en casa, su factura de electricidad mensual aumenta unos $30 a $50, pero esto podría hacer su hogar más atractivo para una nueva generación de compradores con conciencia ecológica.

Inversión: las estaciones de carga para casa van de $1,000 a $4,500, dependiendo del cableado de su casa y de qué tipo de estación de carga elija.

Crédito fiscal: un crédito fiscal igual al 30% de los costos de propiedad de recarga de vehículos de combustible alternativo que califique (como cargadores para vehículos eléctricos) puede estar disponible cuando las unidades se colocan en ciertas áreas de los Estados Unidos.